Quién tiene la culpa

POR Marta Molero Llano
22/05/2024

Mujer libre de culpa

La culpa es un componente que está muy presente en toda relación tóxica, hacer sentir culpable al otro es una estrategia habitual que tiene el objetivo de manipular a la otra persona para que haga o actúe de determinada manera.

Manipular al otro para hacerlo sentir culpable, así como reaccionar a esta manipulación sintiéndote culpable, ambos comportamientos nos alejan bastante de una relación saludable.

 

En una relación tóxica, ¿quién tiene la culpa?

 

Se habla mucho de que en las relaciones de este tipo hay una persona tóxica que sería la que comienza con estos comportamientos que derivan en situaciones desagradables, es la que manipula, maltrata, abusa, etc. y la otra persona simplemente es la que recibe y sufre.

Esta teoría le quita toda la responsabilidad a una de las partes, y para que una relación de cualquier tipo se dé, se necesitan al menos a dos personas, si hay un maltratador, éste necesita a una víctima.

Ambos roles, maltratador y víctima, son tóxicos, la diferencia está en que cada uno actúa de una manera, pero ambos se complementan y se necesitan el uno al otro para desarrollarse.

Por lo tanto, en una relación tóxica NO EXISTEN CULPABLES, ni tampoco hay personas que sean tóxicas, hay comportamientos tóxicos entre los miembros de la relación que pueden llegar a ser muy dañinos y destructivos para ambas partes.

Por lo tanto, eres RESPONSABLE de todo lo que estas viviendo en tu relación.

 

Te has preguntado alguna vez

¿para qué yo tengo este tipo de relación y otra persona no?

¿para qué aguanto estos comportamientos de mi pareja si no me hacen feliz?

¿de qué manera alimento yo estos comportamientos?

 

Hacerte RESPONSABLE de lo que estás viviendo es:

- Hacerte responsable de tu bienestar, dejar de esperar a que tu pareja cambie para tú estar bien.

- No justificar los comportamientos de tu pareja que te hacen sentir mal.

- No echar la culpa a tu pareja, nadie te obliga a estar con esta persona.

- Dejar de esperar a que cambie, la única persona que tiene que cambiar eres tú.

- Trabajar en ti para sanar las heridas que te hacen mantenerte en un mismo patrón de relación.

 

Recuerda que tú decides con quien compartes tu vida y hasta cuándo estás dispuesta a sufrir